¿Por qué es importante contratar un seguro de vida?

La icónica frase “Ama a tu prójimo como a ti mismo” podría ser un excelente eslogan para dar entrada a los indecisos, pues el  seguro de vida  es un regalo que se le da a quienes se aman a sí mismos y a sus seres queridos, de hecho, se activa un reconocimiento económico en el caso de que el asegurado fallezca o tenga una discapacidad grave, lo que prevé una prima económica para su familia.

El tema es moralmente exigente, los sentimientos como la conciencia, el amor y el cariño por los familiares son los motores de esta inversión. Técnicamente lo que sucede es que el asegurado decide beneficiar de un capital a sus seres queridos, y, cuando se concreta el contrato o la póliza, decide quiénes serán los que se beneficiarán de él en caso de un contratiempo.

La póliza de seguro de vida: Tipos y casos

La póliza de vida no es más que un acuerdo escrito, un contrato celebrado con una compañía de seguros. En el contrato hay cláusulas a respetar por las cuales los que queden con vida pueden tener que recibir dinero. El asegurador indica a su cliente la suma a asegurar, la duración de la cobertura, el límite mínimo y máximo a pagar por la prima anual. Sin embargo, las políticas y los casos no son todos iguales, por lo que existen tres tipos de políticas:

  • Póliza de seguro de muerte.
  • Póliza de seguro de vida.
  • Política mixta.

Si el cliente decide contratar un  seguro de vida, significa que, en caso de fallecimiento, sus beneficiarios reciben el capital desembolsado en su totalidad. Otro tipo de seguro es la  póliza mixta  que garantiza (independientemente de que el asegurado esté vivo o no vivo) que el beneficiario recibirá el capital. El último tipo de póliza es el  seguro de vida merece una exhaustiva revisión.

Primero, la compañía de seguros paga al asegurado de por vida desde el momento en que se concluye el contrato. Este tipo de seguro es una especie de alcancía, una inversión para la jubilación y especialmente para quienes pretenden protegerse ante tiempos precarios y variables, sobre todo para familias de un solo ingreso, que tienen hijos pequeños.

En este último caso, el contratista decide en la estipulación del contrato, y según sus necesidades, la duración de la prima que varía de 5-10 años a 30-35 años. El pago se puede realizar al principio del contrato o en cuotas regulares. Aparte, la cantidad de dinero varía según la edad (cuanto más joven eres, menos pagas); el estado de salud y la vida que se lleva; la duración del pago, la cantidad que desea garantizar a sus beneficiarios y tiene una prima fija pactada (todos los parámetros que también se pueden cambiar a lo largo de los años).

Asequible en muchos aspectos, el  seguro de vida  puede, por lo tanto, facilitar en gran medida a los miembros vivos de la familia que continúen regularmente con su vida cotidiana. Esto puede representar una protección útil tanto para el futuro de los seres queridos como una forma de inversión, que se puede utilizar en vida. En todas las familias se incurre en varios gastos mensuales, ligados a las necesidades básicas o comodidades diarias, y como la vida cambia constantemente, no se puede evitar pensar en cómo los sucesos inesperados pueden comprometer seriamente su estilo vida.

¿Cuáles son los beneficios de una póliza de seguro de vida?

Como se ha mencionado, una póliza de seguro de vida puede representar una protección importante para el futuro de su propia familia, pero también una fórmula de inversión real, de la que beneficiarse personalmente. En realidad, existen varias soluciones que se adaptan para cubrir diferentes necesidades. Aquí hay una breve guía sobre por qué y cuándo elegir un seguro de vida y todos los beneficios que esta opción puede traer.

Seguro de vida: proteja a sus seres queridos

Las pólizas de seguro de vida son la solución adecuada para quienes tienen la responsabilidad económica exclusiva de una familia y quieren estar seguros de poder garantizar, en caso de fallecimiento, una cobertura económica adecuada para mantener el nivel de vida de sus seres queridos. Las pólizas de seguro de vida asociadas al préstamo están incluidas en el caso de fallecimiento temporal, que tienen una duración coincidente con el plan de amortización y garantizan el pago de la deuda residual en caso de fallecimiento prematuro del acreedor.

Por otro lado, las pólizas que no tienen una fecha de vencimiento fija, pero que terminan al ocurrir el evento asegurado, o el fallecimiento del titular del contrato, son el caso de muerte a vida completa. La ventaja de estipular este tipo de políticas es evidente, porque implica que los familiares puedan solucionar problemas económicos graves.