Elige la moto que necesitas evaluando tus necesidades y presupuesto

Una motocicleta es mucho más que un vehículo de transporte. Se trata también de una fiel compañera de aventuras y desafíos.

La diferencia entre una moto y un vehículo convencional de 4 ruedas además de su capacidad de traslado, es que en las motos se experimenta un mayor nivel de velocidad y de contacto con la naturaleza cuando este es el destino.

Pero si se trata de utilizar la moto para desplazarse en medio de la ciudad, esta es mucho más efectiva por su facilidad de desplazamiento entre el abundante tráfico que día a día llena las calles y avenidas.

Por eso muchas personas además de sus vehículos poseen una moto como complemento ideal para que al momento de necesitar ir a cualquier destino cuenten con esta cómoda opción de viaje.

Existen diferentes modelos y marcas, unas más potentes que otras, y también están aquellas que poseen características de carrera o paseo, según sea el caso o necesidad de quien la adquiera; todo esto representa costos diferentes de acuerdo a las características de cada una.

Si estás pensando en comprar una moto, pero necesitas algún tipo de orientación para tomar la mejor decisión, te diremos que aspectos tener en cuenta para adquirir una que cubra todas tus necesidades de traslado y expectativas.

¿Qué tipo de moto buscas?

Motos para uso dentro de la ciudad

Si estás buscando una moto que te sirva para ir de tu casa al trabajo y hacer diligencias dentro de la ciudad, puedes optar por una moto de paseo sencilla, la cual puede cubrir a la perfección esta necesidad.

En este aspecto una moto tipo Scooter de 125cc puede ser lo que estás buscando, este tipo de motos se pueden conseguir a partir de 1100 Euros dependiendo el modelo y la marca que se desee.

Algunas son más o menos sofisticadas, unas con mayor ergonomía y comodidad, allí radica principalmente la diferencia en precio de este tipo de motos para uso básico dentro de la ciudad.

Las motos tipo Scooter son motos de paseo de una potencia moderada, diseñadas especialmente para desplazarse en distancias cortas y sin obstáculos para un mejor rendimiento y durabilidad.

Motos para viajes cortos fuera de la ciudad

Para quienes les gusta realizar viajes cortos o largos a lugares turísticos o apartados de la ciudad, se les recomienda un tipo de moto de mayor alcance y potencia para un desplazamiento más eficaz.

La recomendación es que adquieran una Scooter de 300cc, la cual les puede servir dentro y fuera de la ciudad si lo que desean es contar con un vehículo cuya potencia les sirva para vivir aventuras de fin de semana y en temporadas vacacionales.

Con la potencia de una Scooter de 300cc, se puede tener una moto que cumpla una doble función, ya que nos puede servir para ir al trabajo y para salir de viaje cuando así se requiera. La capacidad de estas motos alcanza pequeños viajes de distancias moderadas y terrenos estables para evitar averías por su capacidad y soporte.

Motos para viajes largos fuera de la ciudad

Los viajes más largos demandan no solo mayor potencia del vehículo que soporte los largos trayectos con un rendimiento eficiente, también implica mayor comodidad para el conductor y su posible acompañante si es el caso, además también es ideal que cuente con un depósito donde los tripulantes puedan llevar algunas pertenencias.

En ese caso las mejores alternativas se encuentran en motos grandes que cuenten con una potencia superior a los 650cc. Podría ser una moto tipo naked, las cuales pueden encontrarse de hasta 1300cc. Con estas características se pueden evaluar las diferentes alternativas y optar por aquellas que representen la mejor opción en cuanto a funcionalidad y costos.

Una moto representa muchos beneficios para quienes las poseen, porque además suele satisfacer las preferencias de velocidad de los conductores y son un cómodo medio de trasporte muy bueno a la hora de querer pasear también.

Una moto es un vehículo para personas mayores de edad con diferentes necesidades, desde jóvenes de 20 años, hasta adultos mayores de 50 años que quieran trasladarse en rutas cortas en su propio vehículo.